Precios de la carne de res alcanzan niveles récord en Estados Unidos y se mantienen al alza
Los precios de la carne de res en Estados Unidos han experimentado un aumento sostenido, alcanzando niveles históricos que afectan tanto a los consumidores como a la industria. En junio, el precio promedio por libra de carne molida llegó a 6,12 dólares, un incremento cercano al 12% respecto al año anterior, mientras que los cortes de carne para asar subieron un 8%, situándose en 11,49 dólares por libra, según datos del gobierno estadounidense.
Esta escalada no es reciente; la reducción constante del hato ganadero estadounidense desde 2019 —que actualmente registra su nivel más bajo desde 1951 con 86,7 millones de cabezas— junto con factores climáticos adversos como la sequía y el aumento en los costos del alimento para ganado han presionado la oferta. Además, la aparición del parásito conocido como mosca barrenadora en México ha provocado restricciones en las importaciones de ganado desde ese país, lo que representa alrededor del 4% del suministro estadounidense.
Los altos precios del ganado también incentivan a los productores a vender más hembras en lugar de conservarlas para reproducción, afectando el crecimiento futuro del hato. A esto se suman posibles tarifas arancelarias sobre las importaciones de carne provenientes de países como Brasil, lo que podría encarecer aún más los insumos necesarios para elaborar productos cárnicos con las características demandadas por los consumidores estadounidenses.
A pesar del aumento en los precios, la demanda por carne de res se mantiene sólida durante la temporada alta de parrilladas. Sin embargo, expertos indican que cualquier expansión significativa en la producción ganadera tardará al menos dos años en materializarse debido a los tiempos necesarios para la cría y engorde del ganado. En consecuencia, se espera que los precios permanezcan elevados con solo moderados descensos estacionales hacia el otoño.