Americar enfrenta ajustes tras caída del mercado automotriz en Chile
Americar, el mayor concesionario automotriz en Chile, que comercializa más de 70 mil vehículos al año y factura cerca de US$1.600 millones entre Chile y Perú, atraviesa un proceso de ajuste ante la caída sostenida del mercado automotor. La empresa, que agrupa marcas como Salazar Israel, Portillo, Coseche, Servimaq y Clicar, ha cerrado 24 sucursales y reducido su plantilla en más de 400 trabajadores para adaptarse a la nueva realidad del sector.
Fundado en 1988 por los hermanos Jorge y Claudio Israel Quilodrán, el grupo creció principalmente mediante adquisiciones estratégicas que le permitieron consolidar una amplia red con más de 160 sucursales y una oferta diversificada de 44 marcas en Chile y 22 en Perú. Sin embargo, tras un auge récord en ventas entre 2021 y 2022, el mercado experimentó una fuerte contracción que se reflejó en los resultados financieros del grupo, con caídas significativas en unidades vendidas e ingresos.
El CEO Mauricio Fuenzalida explica que la industria automotriz es altamente cíclica y que factores como el aumento en los precios de los vehículos debido al tipo de cambio, normas ambientales más estrictas y tasas de interés elevadas han impactado negativamente las ventas. En respuesta, Americar implementó medidas recomendadas por consultores externos para optimizar costos, incluyendo renegociación de arriendos, centralización de procesos y una reorganización interna que unificó la venta de autos usados bajo la marca Clicar.
Los accionistas principales realizaron un aumento de capital cercano a los $11 mil millones para financiar esta reestructuración y continuar invirtiendo en tecnología e infraestructura. Según Fuenzalida, la empresa mantiene una sólida posición financiera y relaciones estables con proveedores y entidades financieras. El grupo proyecta mejorar su participación de mercado en ambos países mientras navega un escenario desafiante para la industria.