Ordenan a ICE detener temporalmente la mayoría de las redadas en sectores agrícolas y hoteleros en EE.UU.
La Administración del expresidente Donald Trump ha emitido una directiva para frenar temporalmente la realización de operativos de inmigración en áreas como fincas, hoteles y restaurantes en Estados Unidos. La medida, basada en un comunicado interno revisado por Reuters, fue ordenada directamente por Trump, quien no estaba al tanto de la magnitud de la campaña de fiscalización y decidió detenerla tras recibir información al respecto.
La nueva instrucción, vigente desde el pasado jueves, permite continuar con investigaciones relacionadas con delitos graves como la trata de personas, pero limita las redadas masivas dirigidas a inmigrantes sin antecedentes criminales. La decisión responde a una reciente presión interna y a protestas sociales que cuestionaban el impacto de estas acciones.
El contexto político de esta medida se da en un momento en que Trump prometió durante su campaña presidencial reducir la inmigración ilegal, centrándose inicialmente en criminales peligrosos. Sin embargo, en los últimos meses se han registrado operativos que han afectado a miles de personas sin antecedentes penales, generando rechazo tanto desde sectores democráticos como de organizaciones sindicales del sector agrícola y hotelero. La administración también anunció que pronto emitirá una orden para evaluar cómo estas políticas afectan a industrias clave del país.
Mientras tanto, los grupos agrícolas expresaron su preocupación por la posible interrupción del flujo laboral, fundamental para la cadena alimentaria. La Unión de Trabajadores Agrícolas manifestó su escepticismo respecto a que la nueva directiva mejore la situación de los trabajadores indocumentados, señalando que las redadas continúan afectando comunidades agrícolas pese a las restricciones oficiales.