Compensaciones por cortes eléctricos: ¿por qué las pagan los propios usuarios?
Desde junio de 2024, los clientes de la mayoría de las empresas distribuidoras eléctricas en Chile están pagando un cargo adicional, que representa alrededor del 0,52% en sus cuentas mensuales. Este monto se destina a financiar las compensaciones que las compañías deben otorgar a los usuarios afectados por cortes en el suministro eléctrico. De esta manera, los propios consumidores asumen parte del costo de las indemnizaciones a las que tienen derecho por ley.
El académico Humberto Verdejo, del Departamento de Ingeniería Eléctrica de la Universidad de Santiago, explicó en Cooperativa que este mecanismo responde a un acuerdo entre la Comisión Nacional de Energía (CNE) y las empresas distribuidoras para cumplir con la normativa vigente sin generar un incremento considerable en las tarifas. Para ello, se aplicó un esquema basado en una ’empresa modelo’, que establece estándares ideales de funcionamiento, y se decidió socializar los costos asociados a compensaciones dentro de la tarifa eléctrica.
Este diseño implica una flexibilización en los estándares de calidad del servicio según la comuna y la distribuidora, permitiendo que algunas zonas tengan mayores horas de interrupción que otras. Además, el sistema tarifario contempla un tope máximo para estas compensaciones basadas en la empresa modelo, aunque en la práctica las indemnizaciones reales suelen ser superiores y son asumidas directamente por las empresas. En definitiva, si bien técnicamente se esperaría que las compañías paguen íntegramente estas compensaciones, la socialización busca evitar aumentos significativos en el valor final para los usuarios.
Este enfoque ha generado críticas por percibirse como injusto para los consumidores y evidencia desigualdades en la calidad del suministro eléctrico entre distintas comunas. La CNE es la entidad responsable de definir estos criterios tarifarios en conjunto con las distribuidoras, equilibrando el cumplimiento normativo con la contención del costo para el usuario final.