Tensiones y negociaciones entre Chile Vamos y Republicanos marcan la recta final hacia las elecciones
El distanciamiento político entre Chile Vamos y el Partido Republicano se refleja en la reciente interacción tensa entre Evelyn Matthei y José Antonio Kast, quienes coincidieron sin diálogo en un viaje a Puerto Montt para participar en el Salmón Summit 2025. A pesar de compartir vuelo y espacio en eventos públicos, mantuvieron una distancia marcada que simboliza el deterioro de las relaciones entre ambos bloques desde el segundo proceso constitucional.
Las diferencias públicas se han profundizado con denuncias cruzadas y declaraciones que no contribuyen a la reconciliación, como la acusación de Matthei sobre una campaña difamatoria atribuida a adherentes republicanos y la respuesta desde ese sector que desestima tales denuncias. Este ambiente ha generado preocupación sobre el impacto que estas tensiones puedan tener en la competencia electoral parlamentaria y en eventuales apoyos cruzados en una segunda vuelta presidencial.
En medio de esta compleja situación, las negociaciones para coordinar candidaturas en regiones binominales han enfrentado obstáculos significativos. Un episodio destacado fue el rechazo inicial expresado por Arturo Squella, presidente del Partido Republicano, a una propuesta de Chile Vamos, lo que provocó molestia interna y ralentizó los acercamientos. Sin embargo, posteriores conversaciones entre dirigentes de ambos sectores buscan retomar acuerdos que permitan fortalecer las opciones electorales conjuntas y evitar la fragmentación del voto.
La falta de unidad contrasta con el llamado de algunos actores políticos y empresarios que insisten en la necesidad de cohesión para enfrentar los desafíos electorales y asegurar mayorías parlamentarias que respalden al próximo gobierno. La disputa presidencial y las diferencias programáticas entre Matthei y Kast profundizan la división, complicando aún más la construcción de consensos dentro del bloque oficialista.