Cumbre de la OTAN en La Haya: desafíos en gasto militar, Ucrania y tensiones en Medio Oriente
Los días 24 y 25 de junio, los 32 países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) celebran una cumbre clave en La Haya, donde se discutirán temas cruciales para la seguridad global. En un contexto marcado por tensiones geopolíticas crecientes, la reunión abordará principalmente el incremento del gasto militar, la guerra en Ucrania y las recientes hostilidades en Medio Oriente.
Uno de los puntos más destacados es la presión ejercida por Estados Unidos para que los países europeos eleven su inversión en defensa al 5% de su Producto Interno Bruto (PIB), una cifra que supera ampliamente el objetivo actual del 2% acordado en 2014. Esta propuesta ha generado divisiones entre los aliados, con España manifestando reservas y logrando mayor flexibilidad para definir su propio ritmo de cumplimiento. Mientras tanto, países como Alemania y Noruega apoyan el aumento presupuestario, aunque naciones como Bélgica ya han expresado dificultades para alcanzar las nuevas metas.
Otro tema central es la postura de la OTAN frente al conflicto en Ucrania, que supera los tres años desde la invasión rusa. Aunque Estados Unidos mantiene su respaldo a Kiev, existen diferencias internas respecto al nivel de compromiso. La Alianza ha confirmado que proporcionará más de 35.000 millones de euros en ayuda militar este año, pero no se ha convocado una sesión formal con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, quien solo asistirá a una cena de honor.
Adicionalmente, varios países miembros están reforzando sus medidas defensivas ante posibles amenazas rusas, como el despliegue progresivo de tropas alemanas en Lituania y el seguimiento cercano por parte de Finlandia a las maniobras militares rusas. La OTAN también planea aumentar su capacidad operativa con un despliegue rápido de hasta 300.000 efectivos para responder a ataques multidimensionales.
Finalmente, aunque no figura oficialmente en la agenda, las recientes tensiones entre Israel e Irán han cobrado protagonismo debido a ataques estadounidenses contra instalaciones nucleares iraníes. Esto ha elevado las preocupaciones sobre la estabilidad internacional y ha sido objeto de declaraciones oficiales que defienden la legalidad de estas acciones.