Ruanda y RDC sellan acuerdo de paz que facilitará acceso de EE.UU. a minerales estratégicos
Este viernes, Ruanda y la República Democrática del Congo (RDC) formalizaron un acuerdo histórico en la Casa Blanca que pone fin a más de 30 años de enfrentamientos armados entre ambos países. La firma del denominado Acuerdo de Washington contó con la presencia del secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, y el respaldo del presidente Donald Trump, además de la mediación de Catar.
El pacto establece compromisos firmes para respetar la integridad territorial, resolver disputas por vías pacíficas y prohibir cualquier acto hostil o apoyo a grupos armados. Asimismo, contempla la protección tanto de civiles como del personal humanitario, garantizando su libertad de movimiento. En materia militar, se acordó que la reintegración de combatientes a las fuerzas armadas y policiales congoleñas será rigurosa, individualizada y condicional.
Entre los principales puntos destaca la creación inmediata de un mecanismo conjunto en seguridad para promover la estabilidad y el desarrollo regional. El acuerdo también impulsa el retorno seguro de refugiados y desplazados internos con apoyo internacional, así como el respaldo a la Misión de Estabilización de la ONU en RDC (Monusco). En un plazo máximo de tres meses, ambas naciones lanzarán un marco para la integración económica regional destinado a ampliar el comercio exterior e inversión vinculada a minerales críticos.
Este marco incluirá auditorías independientes y mecanismos anticorrupción para supervisar cadenas de suministro y proyectos económicos, buscando bloquear vías ilícitas. El presidente Trump destacó que Estados Unidos obtendrá derechos sobre minerales congoleños esenciales para industrias tecnológicas, en medio de una competencia geopolítica con China por influencia en África. Las autoridades ruandesas y congoleñas coincidieron en que este acuerdo es solo el inicio hacia una paz duradera basada en cooperación y valentía para su implementación.