Análisis del impacto de la primaria oficialista en el escenario político de la centroderecha chilena
Tras la contundente victoria de Jeannette Jara, candidata comunista, en las primarias del bloque oficialista, expertos políticos comienzan a evaluar las consecuencias para la carrera presidencial y el equilibrio político en Chile. En paralelo, desde el comando de Evelyn Matthei, aspirante de Chile Vamos, se celebraba anticipadamente su eventual representación como carta de la derecha en los comicios.
Sin embargo, datos recientes de la encuesta Cadem muestran un panorama complejo: José Antonio Kast, del Partido Republicano, lidera con un 24% en intención de voto espontáneo, seguido por Jara con un 16%, mientras que Matthei registra un 10%, evidenciando una caída significativa en las últimas mediciones. Este contexto refleja una dispersión importante dentro del electorado de centroderecha.
El análisis realizado por !Man Asuntos Públicos destaca que, aunque la centroderecha no realizó primarias, el resultado oficialista podría resultar favorable para ese sector. La consolidación del Partido Comunista como principal fuerza dentro de la centroizquierda implica una mayor influencia en la agenda legislativa y en la coordinación política para futuras elecciones parlamentarias.
Además, el estudio advierte sobre las tensiones internas que este escenario genera en partidos como la Democracia Cristiana, que enfrenta un dilema entre alinearse con el PC o distanciarse para preservar su identidad histórica. También se señala una creciente polarización política y una baja participación electoral en las primarias oficialistas, atribuida al cansancio del electorado tras múltiples procesos electorales recientes y experiencias constitucionales fallidas.
Finalmente, respecto a la centroderecha, se subraya el riesgo que implica la dispersión de candidaturas y listas parlamentarias frente a una oposición más unificada. Los expertos recomiendan estrategias para evitar que Jara capitalice esta división y advierten sobre la importancia de impedir que su figura adquiera un perfil similar al carisma y cercanía que caracterizó a expresidentes como Michelle Bachelet.