Capacidades militares de EE.UU. para atacar las instalaciones nucleares subterráneas de Irán
En medio del aumento de las tensiones entre Israel, Irán y Estados Unidos, surge la posibilidad de un ataque militar con capacidades avanzadas. La planta de enriquecimiento nuclear de Fordo, ubicada en un complejo subterráneo profundamente protegido, se ha convertido en uno de los objetivos principales para las fuerzas israelíes y estadounidenses. Sin embargo, los esfuerzos israelíes por penetrar sus defensas no han tenido éxito hasta ahora.
Según informes del New York Times, solo una bomba en el arsenal estadounidense, conocida como GBU-57 o “Penetrador de Artillería Masiva”, tiene la potencia suficiente para destruir este tipo de instalaciones. Con un peso cercano a las 13.600 kilos y lanzable desde bombarderos B-2, esta arma representa la capacidad militar más avanzada para atacar objetivos subterráneos altamente protegidos.
La utilización de esta bomba implicaría que Estados Unidos se involucre directamente en el conflicto con Irán, algo que hasta ahora Washington ha evitado durante las campañas presidenciales. Aunque el gobierno estadounidense mantiene abiertas las opciones militares, expertos señalan que una sola detonación no sería suficiente para destruir completamente una base como Fordo; sería necesaria una serie de ataques coordinados en oleadas.
Por su parte, Teherán ha reiterado que su programa nuclear tiene fines civiles y ha advertido que cualquier acción militar por parte de Estados Unidos o Israel podría cerrar la vía diplomática. A pesar de las negociaciones en curso, las tensiones siguen escalando tras recientes ataques israelíes a instalaciones iraníes y las respuestas iraníes. La situación continúa siendo incierta, con decisiones clave pendientes y un escenario potencialmente volátil en la región.