Celebración en Ucrania de las tradiciones de verano en medio de la guerra
En Ucrania, la festividad de Ivana Kupala se convirtió en un acto de resistencia cultural, celebrada este sábado en diferentes regiones del país. La tradición, con raíces en el paganismo eslavo, conmemora el solsticio de verano a través de rituales que simbolizan fertilidad, pureza y renovación, valores que anteceden a la cristianización de la región.
En el Museo Nacional de Arquitectura Popular y Vida Ucraniana, ubicado en las afueras de Kyiv, grupos de personas vestidas con ropa tradicional recorrieron espacios con construcciones antiguas, participando en danzas, juegos y talleres artesanales. Mujeres con vinoks — coronas hechas con flores silvestres — destacaron entre los asistentes, quienes disfrutaron de un día dedicado a la cultura y la naturaleza.
Durante la noche, la celebración culminó con una ceremonia alrededor de una gran hoguera, donde los participantes realizaron un rito de purificación saltando sobre las llamas y formando círculos en torno al fuego. Para muchos, estos momentos representan una oportunidad para conectarse con sus raíces en medio del conflicto y la incertidumbre provocada por la guerra con Rusia.
Testimonios como el de Saba Alekseev reflejan cómo estas tradiciones ofrecen un respiro ante la violencia: “Es un momento para respirar aire fresco sin pensar en la guerra, aunque sea solo por un rato”. Por su parte, jóvenes como Sofia Orel consideran vital preservar estas costumbres: “Es importante mantener viva nuestra cultura y enseñarla a las futuras generaciones”.