Cumbre BRICS 2025: desafíos internos y el rol cauteloso de Chile en un contexto global tenso
El bloque BRICS, conformado originalmente por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, se prepara para su cumbre anual los días 6 y 7 de julio en Brasil. Esta edición llega en un momento complejo debido a tensiones globales, la guerra comercial impulsada por Donald Trump y el conflicto en Medio Oriente. Además, la ausencia presencial de los mandatarios Xi Jinping y Vladimir Putin debilita la fuerza simbólica del encuentro.
Putin no asistirá por temor a una posible detención ordenada por la Corte Penal Internacional debido a acusaciones relacionadas con la guerra en Ucrania, participando solo vía videoconferencia. Por su parte, China estará representada por su primer ministro Li Qiang, ya que Xi Jinping tampoco participará ni presencial ni virtualmente, algo sin precedentes desde su llegada al poder en 2013.
En este contexto, Chile ha sido invitado como observador y su presidente Gabriel Boric confirmó su asistencia. Sin embargo, esta participación ha generado controversias internas por el riesgo de afectar las relaciones comerciales y políticas con Estados Unidos y la Unión Europea. La subsecretaria de Relaciones Exteriores, Gloria de la Fuente, aseguró que Chile mantendrá una postura propia basada en sus valores democráticos y que no hay planes inmediatos para solicitar la membresía plena al bloque.
La cumbre también se ve afectada por las amenazas de Trump de imponer aranceles del 100% a los países BRICS si avanzan en iniciativas como la desdolarización o la creación de una moneda común. Mientras tanto, países como Colombia se acercan al bloque mediante su incorporación al Nuevo Banco de Desarrollo, buscando diversificar sus fuentes de financiamiento frente a organismos tradicionales como el FMI.
Este encuentro será clave para evaluar la cohesión interna del grupo y el papel que desempeñarán sus miembros ante un escenario internacional cada vez más polarizado, donde emergen nuevas alianzas económicas y políticas sin abandonar los vínculos con Occidente.