Estudio revela que la reducción en la informalidad laboral en Chile se debe principalmente a un aumento en la inactividad y el desempleo, con efectos diferenciados por género
Durante los últimos seis meses, Chile ha experimentado una significativa disminución en el empleo informal, con una caída récord de más de 216 mil puestos en el período febrero-abril de 2025. Esta tendencia se refleja en una baja histórica en la tasa de ocupación informal, que alcanzó su nivel más bajo desde el inicio del actual gobierno, situándose en 25,8 %. Sin embargo, esta reducción no ha sido acompañada por una creación equivalente de empleo formal, lo que ha llevado a un incremento en la fuerza de trabajo activa y un aumento en la tasa de desempleo. La diferencia en las dinámicas laborales por género es notable: mientras que en las mujeres la caída en informalidad se asocia principalmente a una transición hacia empleos formales, en los hombres el descenso está vinculado al aumento del desempleo y la inactividad.
El análisis del ‘Zoom de Género’ también revela que los movimientos en el mercado laboral están relacionados con cambios en la población inactiva y desempleada. En particular, las cifras muestran que las personas que dejan de buscar empleo o se mantienen inactivas aumentaron significativamente en estos meses. La investigadora Carolina Molinare explica que estos cambios explican mayoritariamente la caída de empleos informales y resaltan las diferencias entre géneros. En las mujeres, la reducción de informalidad se concentra en aquellos que trabajan en lugares de difícil fiscalización y hogares con menores de tres años, mostrando una transición positiva hacia empleos formales. En cambio, para los hombres, los mayores descensos están asociados a dificultades en su inserción laboral debido al aumento del desempleo y la inactividad.
El informe también destaca que las responsabilidades de cuidado influyen considerablemente en la participación laboral femenina, especialmente en hogares con menores en edad preescolar. Para revertir estas tendencias, los expertos proponen impulsar reformas como la ley de sala cuna para reducir costos asociados a la contratación femenina y promover una participación más equitativa. Además, señalan la necesidad de diseñar estrategias para apoyar a los sectores productivos frente a los mayores costos laborales derivados de nuevas regulaciones y condiciones económicas.