Harvey Whitehouse: Claves evolutivas para repensar la cooperación humana ante desafíos globales
Harvey Whitehouse, destacado antropólogo y director del Centre for the Study of Social Cohesion en la Universidad de Oxford, ha dedicado su carrera a investigar los fundamentos evolutivos que sustentan la cohesión social humana. En su reciente obra “Herencia. Los orígenes evolutivos del mundo moderno”, disponible en Chile, explora tres rasgos universales —copiar normas, la necesidad de pertenecer y la creencia— que han definido nuestra evolución y que hoy enfrentan a la humanidad a un punto crítico.
En diálogo con La Tercera, Whitehouse destaca que, a pesar de la diversidad cultural y religiosa, existen patrones comunes en las creencias humanas que trascienden geografías y épocas. Su experiencia en Papúa Nueva Guinea le mostró que muchas ideas sobre el espíritu y los ancestros reflejan supuestos compartidos globalmente. Asimismo, subraya que el conformismo y el tribalismo son mecanismos universales que fortalecen la pertenencia al grupo, pero advierte que esta dinámica también puede limitar el cambio social necesario.
El investigador señala que uno de los impulsores históricos para la expansión de sociedades complejas fue la guerra y el desarrollo de tecnologías militares, aunque actualmente estas herramientas letales amenazan con fragmentar o destruir comunidades. Por ello, sostiene que es urgente replantear nuestra forma de pensar para garantizar la supervivencia colectiva. Además, explica que mientras el conformismo impulsa a seguir normas para evitar la exclusión social, el tribalismo puede dar lugar a líderes comprometidos capaces de desafiar al grupo para promover cambios positivos.
Whitehouse se muestra optimista respecto al futuro si se aprovechan estos rasgos humanos para fomentar cooperación. Destaca el potencial de las religiones como fuerzas cohesionadoras para impulsar acciones ambientales y sociales, superando posturas puramente científicas que pueden generar desesperanza. También comparte experiencias donde discursos adaptados a la psicología tribal lograron aumentar la confianza entre grupos enfrentados. Finalmente, reflexiona sobre su vivencia en comunidades remotas donde el sentido extendido de familia y solidaridad permitió enfrentar adversidades colectivamente, un modelo que considera esencial para abordar los desafíos globales actuales.