Irán intensifica esfuerzos diplomáticos mientras aumenta la tensión con EE. UU. e Israel
En medio de un conflicto que ya cumple casi una semana, Irán ha redoblado sus esfuerzos diplomáticos para buscar una salida negociada, aunque la tensión en la región continúa en aumento. A pesar de los ataques y las bajas reportadas, Teherán mantiene abiertas las vías de diálogo con países europeos y Turquía, mientras refuerza su postura de resistencia frente a Israel y Estados Unidos.
Las cifras oficiales iraníes indican más de 430 muertos y miles de heridos, en su mayoría civiles, en un contexto de intensos bombardeos y ataques con misiles y drones. Organizaciones independientes como HRANA elevan el número de víctimas a más de 700, reflejando la gravedad del conflicto. En Israel, los daños y las bajas permanecen estables desde el inicio, con una cifra de 24 fallecidos hasta ahora.
Mientras tanto, las acciones militares continúan, incluyendo ataques a objetivos estratégicos en Irán por parte de Israel. La reciente ofensiva contra la planta nuclear de Isfahán ha sido particularmente significativa, además de los bombardeos en otras ciudades iraníes. La Guardia Revolucionaria aún no ha confirmado oficialmente las bajas en su estructura militar, pero sí ha reportado pérdidas en otras localidades.
En el ámbito diplomático, Irán intenta mostrar apertura al diálogo sin renunciar a sus posiciones más duras. El ministro de Exteriores iraní ha viajado a Turquía para coordinar esfuerzos con Ankara, que se ha ofrecido como mediador y ha asegurado su apoyo para facilitar futuras negociaciones entre Teherán y Washington. Sin embargo, advirtió sobre los peligros de una posible intervención militar estadounidense en el conflicto, calificándola como muy peligrosa para toda la región.
Estados Unidos mantiene en reserva su decisión sobre su posible participación en las hostilidades, con el presidente Trump indicando que tomará una decisión en las próximas semanas. Por su parte, los rebeldes hutíes en Yemen han advertido que atacarán intereses estadounidenses si Washington se involucra directamente en el conflicto.