Operación encubierta del Mossad: ingreso de drones para ataques en Irán desde dentro
En una acción que demuestra la evolución de las tácticas militares, las fuerzas de inteligencia israelíes lograron infiltrarse en territorio iraní mediante el contrabando de partes de drones no tripulados cargados con explosivos. Esta operación, que duró varios meses, tuvo como objetivo debilitar las defensas aéreas y las capacidades misilísticas de Irán antes de un ataque militar directo.
Según fuentes cercanas a la operación, los componentes fueron introducidos a través de diferentes medios, incluyendo maletas, camiones y contenedores, y posteriormente distribuidos en zonas estratégicas cercanas a instalaciones militares y centros de lanzamiento de misiles. Desde estos puntos, pequeños equipos instalaban los dispositivos, permitiendo que algunos drones destruyeran defensas aéreas y otros atacaran misiles en preparación.
Este despliegue se produjo en un contexto de tensiones crecientes en la región. La ofensiva israelí incluyó ataques con más de 70 aviones de combate en la capital iraní, Teherán, y se produjo días después de que Irán lanzara varias ofensivas con misiles contra Israel. La operación revela la sofisticación y alcance de las acciones encubiertas israelíes que buscan reducir el riesgo para sus fuerzas militares y limitar las capacidades ofensivas iraníes.
Analistas consideran que esta estrategia refleja una transformación en el uso de tecnologías no tripuladas y operaciones clandestinas para influir en conflictos regionales. La acción también evidencia la prolongada vigilancia israelí sobre el programa nuclear y militar iraní, que ha estado bajo seguimiento durante años.